miércoles, abril 03, 2013

No pierdas tu tiempo gritando al sordo -- Poema

Frente a frente
con mi estúpida rebeldía
mi yo llanero
desenfunda palabras que no debería.

Mi ego
(que siempre conspira)
aliado esta vez a la rebeldía
se llena de peros
y señala
y culpa
y aja y desluce

todo lo que brilla
por si solo
que a nadie importa
si es luz, espejo u oro.

Envalentonado
con todos los pro y sus contra,
se yergue como nadie
sobre sus pies de plomo
que en la soberbia se estancan
y hunden

y levanta el índice
y baja el pulgar
y exclama su sentencia final
sobre aquello que mi yo llanero
quería remediar.

"...No hay remedio para la rebeldía,
ni hay remedio para el ego,
nunca importa qué se diga...
-se repite a sí mismo el llanero-
...los que valen son los hechos
pues con ellos cambia un mundo...

No hay comentarios.: